'Manolo la Nuit', el domingo en FDF
TELECINCO.ES
04/08/200809:24 h.Como en gran parte de las comedias de la época, Alfredo Landa es el protagonista absoluto de 'Manolo la Nuit', cinta dirigida por Mariano Ozores y convertida en uno de los grandes clásicos de los años 70.
En esta ocasión, el actor navarro se mete en la piel de Manolo, un recién casado que decide viajar a la Costa del Sol para divertirse y, de paso, ligar con las extranjeras que veranean allí. Mientras tanto, su abnegada mujer (María José Alfonso) se queda en Madrid esperando a su marido, pero pronto se hartará de la espera y tomará una drástica decisión.
Presa del aburrimiento de la gran ciudad, su mujer tomará las riendas de la situación. Harta de las juergas que se trae su marido, decide simular un embarazo y terminar así con la situación.
Repentinamente, las alarmas se disparan. A Manolo no le salen las cuentas y cree que su mujer ha aprovechado su ausencia para ligar con otros hombres.
Mariano Ozores, el director
Perteneciente a una de las sagas más importante de este país, Mariano Ozores comienza a la temprana edad de 14 años a trabajar dentro del mundo del teatro. Un Ozores adolescente, ayuda allá por los años 40 a sus padres, Mariano y Luisa (ambos actores) desempeñando varias funciones dentro de su compañía de teatro.
Poco a poco aquel inquieto niño fue dando muestras de su talento y pronto empezó a publicar sus escritos humorísticos en La Codorniz.
Estos primeros destellos, le abrieron las puertas del cine en 1952 con la película 'Ché que loco' de Benito Perojo y en unos pocos años, Mariano Ozores empezó a dirigir sus primeros programas para TVE.
En 1959 dirige su primer film, 'Las dos y media y... veneno'. Es su primera comedia, género que cultivará a lo largo de su carrera y al que seguirán títulos como 'Salto mortal' (1961), 'Alegre juventud' (1962), 'Chica para todo'...
Los filmes se suceden en su carrera, pero el éxito definitivo no le llegará hasta finales de los 60 y principios de los 70, momento en el que dirige películas que se enmarcan dentro de la comedia típica de la época, en las que se refleja la realidad social del momento y en la que destacan fenómenos como el del landismo.
Precisamente a esta época pertenece 'Jenaro el de los 14' y algunas de las comedias que le alzan como uno de los mejores directores del momento: 'Crónica de nueve meses', '¡Cómo está el servicio!', 'La llamaban la madrina' o 'Manolo la nuit'.
Con la transición, Ozores continúa en la brecha y sigue siendo uno de los directores más prolíficos. Llega entonces el destape, y el director madrileño se sube al carro utilizando su cintas como base para la crítica y parodiar la sociedad y al entorno político del momento.
Sus mayoresllegarán en esta época. Sus películas con Fernando Esteso y Andrés Pajares hacen de él uno de los cineastas más populares para el gran público gracias a títulos como 'Los energéticos' o 'Los bingueros'. éxitos comerciales
Entre los años 80 y 90 baja su ritmo de trabajo y realiza lo que hasta ahora son sus últimos trabajos: 'Pelotazo naciona' (1993) o 'Pareja enloquecida busca madre de alquiler' (1989).
Alfredo Landa
Hijo de un capitán de la guardia civil, el gusanillo de la interpretación nació en Alfredo Landa a una edad tardía. Su primera experiencia sobre las tablas de un teatro la tuvo en la Universidad de San Sebastian, donde estudiaba derecho.
Por primera vez, el joven pamplonica daba rienda suelta a su talento interpretativo. .Le debió gustar porque en su época de estudiante en el País Vasco representó más de cuarenta obras en la Fundación del Teatro Español Universitario.
Desde entoncés, el actor fue creciendo y los papeles fueron llegando poco a poco. Su debut en la industria cinematógrafica se produjo como actor de doblaje, pero pronto, el talento del navarro fue inundando las pantallas, convirtiéndose en protagonista de las comedias más destacadas de los 60 y 70.
Su debut se produjo de la mano de José María Forqué en 1962 y con la exitosa 'Atraco a las tres' que se enmarca dentro de la primera etapa de Alfredo Landa, una época en la que el actor alterna papeles cómicos con teatro.
Sin embargo, sus mayores éxitos como actor llegarían en la década de los 70 y con lo que se ha llegado a denominar el landismo. Alfredo Landa llegó a representar un prototipo de español machista, fanfarrón en el terreno sexual y reprimido. A esta época pertenecen títulos como 'París bien vale una moza' o 'No desearás al vecino del quinto'.
A partir de 1976, se iniciaría su tercera etapa como actor. Es entonces cuando Landa abandona su imagén de macho ibérico y comienza su etapa más interesante artísticamente hablando. El potencial del actor se despliega y el navarro se involucra en proyectos que le valieron el reconocimiento internacional.
A esta época pertenecen 'Los Santos inocentes', 'El bosque animado', 'La vaquilla' o 'Los paraísos perdidos'.
Con más de 120 películas en su haber, Landa puede presumir de tener el premio del Festival de Cannes a la mejor interpretación masculina por 'Los Santos inocentes' y dos Goya (1988 y 1993). En 2003, el actor navarro recibió el homenaje en la Mostra de Valencia.
En 2007, el Alfredo Landa anuncia su retirada definitiva del mundo de la interpretación, retirada que culmina con el Goya de Honor de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de España.