'Franklin & Bash', los enfants terribles de la abogacía californiana

Su encanto, poder de convicción y grandes aptitudes dramáticas permiten a este intrépido abogado ganar caso tras caso. Denostado por los jueces, Peter Bash, a quien da vida Mark-Paul Gosselar, utiliza cualquier treta legal a su alcance para garantizar la victoria de sus clientes. Fuera de los tribunales, es un mujeriego empedernido que acumula una larga lista de conquistas.

Hijo de un conocido abogado, Jared Franklin (Breckin Meyer) nunca quiso seguir sus pasos. Es un jurista agudo e ingenioso capaz de convertir sus intervenciones en la sala en todo un espectáculo, además de un luchador nato volcado en la defensa de los más débiles.

Culto, cosmopolita e implacable en la sala: así es Stanton Infeld (Malcolm McDowell), máximo responsable de un importante bufete californiano en el que trabaja un amplio grupo de letrados. Afable y algo excéntrico, decide reclutar a Franklin y Bash para dar un nuevo aire a su firma.

La detective privada del despacho, Carmen Phillips (Dana Davis) es una mujer fuerte y elegante que desempeña su trabajo honestamente.

Convertirse en juez es el sueño que anhela Damien Karp (Reed Diamond), el sobrino fundador del bufete, un joven con una particular manera de hacer negocios que, tras la llegada de Franklin y Bash, ve amenazada tanto su posición como su interés romántico por Hanna Linden.

Hanna Linden (Garcelle Beauvais), brillante y elegante abogada de Infeld Daniels.

Pindar Singh (Kumail Najiani) es un joven neurótico dotado de una excelente memoria fotográfica, cuyas pormenorizadas investigaciones son esenciales para que Jared y Peter ganen los juicios de sus clientes.